La prensa low-cost

asEn la representación del cambio de época que está teniendo lugar, la prensa low-cost simboliza un mundo que acaba y otro que emerge. Diarios como el International Herald Tribune, representativo del liderazgo de opinión para la elite europea, se oferta ahora como periódico low-cost con hasta el 68% de descuento en sus suscripciones. El IHT es el diario del New York Times en su edición global.

La crisis de la prensa, como las demás crisis que están teniendo lugar al final de la primera década del siglo XXI, es consecuencia de un cambio de dimensión del todo. De vivir en la dimensión de lo físico, se ha pasado a vivir en la dimensión de lo intangible. La información es una materia intangible, y vivimos en la Sociedad de la Información.

Y aunque pueda parecer ilógico que en una época dominada por la información sufran una crisis los medios de información, esta aparente incongruencia no es tal. Porque es el medio el que está en crisis, no la información. Los medios emergentes son herramientas nacidas en esta década como el iPhone.

lowcostpressLa prensa es solo un medio, que como predijo el sociólogo Marshall McLuhan, se ha atomizado tanto como personas hay en el mundo. Hoy cada persona es un medio de comunicación potencial a través de las múltiples herramientas electrónicas que tiene a su disposición para comunicar cualquier cosa, desde cualquier lugar, a todo el mundo, en tiempo real. Eso es lo que representaba su expresión “El medio es el mensaje” con la que dio titulo a un capítulo de su libro Understanding Media; The Extensions of Man (1965). Con la nueva revolución electrónica, la persona como individuo, no los grupos de prensa, se convertían en medio y mensaje, en un mundo robotizado.

La palabra robot viene etimológicamente de la expresión checa ‘robota’, que el escritor  Karel Cápek acuñó a comienzo de los años veinte del siglo pasado para describir el modelo de trabajador servil y que actuaba a modo de autómata. Pero el mundo creativo de la libertad robotizó las máquinas para liberar la capacidad intelectual humana. Los chips no piensan, son herramientas de información que automatizan los procesos. Su uso libera y potencia la capacidad intelectual y creatividad del hombre.

Lo que ha hecho del mundo una realidad global, son la información y las comunicaciones. Los medios en sí son herramientas. El principal desafío del ser humano no está en manejar las nuevas tecnologías, sino en el orden intelectual.

Entender la naturaleza del cambio, y dar sentido a todo ello en su propia vida. Asimilar el crecimiento exponencial en la velocidad y profundidad de los cambios. Ser conscientes de los nuevos riesgos y amenazas. Entre los cuales está la de quieren quieren aprovechar el cambio para robotizar a las personas y alinearlas en el pensamiento único de lo políticamente correcto.

El hombre ha descubierto que la información es algo más que una noticia de prensa. Es lo que contiene sus genes, con lo que programa sistemas y aparatos que le permiten descubrir nuevos planetas, o con lo que puede modificar el tiempo y el espacio, digitalizando los productos. La información es la materia sin la que nada existe. Ni a nivel atómico ni humano. La información es lo que da forma (in-formación) a todo lo demás.  “La información viaja en la cabeza de un espermatozoide”, explicó gráficamente uno de los biólogos al presentar el ADN.

Este cambio de dimensión entre el orden de lo físico y lo intangible es tan descomunal para la mente humana, que le cuesta entender que sus problemas empresariales, educativos o burocráticos, no se acabarán con el low-cost. Porque no es un problema -solo- de gestionar los costes, sino de gestionar estratégicamente la información como materia prima para configurar modelos científicos y de negocio de valor añadido para los usuarios. Y para una nueva forma de entender la vida, potenciando sus valores.